Reflexión
En toda historia de amor siempre hay algo que nos acerca a la eternidad y a la esencia de la vida, porque el amor es tan esencial como el aire que respiramos y porque las historias de amor encierran en sí todos los secretos del mundo sean como sean, amor joven, amor maduro, amor libre, amor prohibido...
Ésta no iba a ser menos, una historia de amores que empiezan, de amores que no cuajan y de amores que terminan, puesto que no existe un amor en paz, ya que el amor es un sentimiento que da mucha guerra, que nos vapulea y nos quita el sueño, nos mantiene alerta, nos sume en celos infernales y nos exprime hasta dejarnos exhaustos. El amor sea joven o sea viejo, siempre viene acompañado de alegrías intensas, sueños quiméricos, fantasías irrealizables, dudas razonables, éxtasis, agonías, tristezas profundas y soledades insospechadas… Si esto no fuera así, dejaría de llamarse Amor... Sí, Amor con mayúscula.
Para que todo vaya mejor, para tener el control de nuestros sentimientos y de nuestra vida, para poder lidiar con ese sentimiento que nos desvivimos por conocer pero si no nos va bien, nos aplasta y condena, es necesario saber muy bien lo que se quiere, a quien se quiere y por qué se quiere. Sólo así estaremos preparados para lo que venga.
2 comentarios:
¡Aquí estoy! Como te prometí (ya no recuerdo cuándo xD) que leería tu novela desde el principio, más vale que me ponga al día. Hay muchos capítulos y casi lo prefiero así :) Ya sabes que te agradezco mucho mucho tus comentarios, tus consejos y tus críticas ^^, ya es hora de que disfrutes de las mías ^o^
Una reflexión muy acertada. Durante mucho tiempo creía que el amor sólo era para quienes realmente sabían aceptarlo tal y como surgía, sin preocuparse lo que pasaría después. Durante los últimos años me negué a mí misma el derecho de amar, ¿por qué? te preguntarás, quizás no sabía apreciarlo o no sabía expresarlo. Pero cuando escribo creo que hay de todo en mí: amor, odio, tristeza, felicidad... Las verdaderas historias de amor no son las que se olvidan, sino las que se recuerdan :) Y estoy encantada de poder leer tu historia. ¡Un besazo enorme!
"Es necesario saber muy bien lo que se quiere" tienes razón, y aunque aún estoy aprendiendo lo que es necesario, supongo que sentir aprecio por alguien es un principio de amor, así pues, tengo amor por tus palabras y tu persona.
Un abrazo Laura!
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